El ministro de Medio Ambiente y Agua, Rubén Méndez, garantizó el suministro de agua para las poblaciones de La Paz y El Alto y negó cualquier posibilidad de aplicar un racionamiento.
“El agua está garantizada para La Paz y El Alto, se descarta toda opinión”, afirmó en alusión a los criterios de algunas autoridades ediles de aplicar un racionamiento por la falta de lluvias.
“Es muy fácil alarmar a la población indicando que no hay agua en las represas, (pero) creo que están hablando sin ningún fundamento”, enfatizó el ministro.
Argumentó que su despacho y la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (Epsas) realizan un constante monitoreo del nivel del agua en las represas de La Paz y El Alto, y que además desde enero se aplicó un plan de contingencia.
“Nosotros hemos previsto desde enero que quizá iba a faltar agua, pero hemos puesto en marcha un plan de contingencia que ha permitido, por ejemplo, el bombeado de agua desde Pongo hasta la laguna Estrellani, hasta la punta de la cumbre y de ahí baja por gravedad a Incachaca, eso costó 6 millones de bolivianos, eso garantiza el agua a Incachaca para la parte central de acá de La Paz”, aseguró.
Si bien admitió que la represa de Milluni no llenó con las lluvias, destacó que gracias al plan de contingencia se perforaron “varios pozos en Tilata y se compraron plantas de tratamiento portátiles para potabilizar el agua, con eso esta normal el agua en El Alto”.
De acuerdo con los datos de Epsas, al 7 de noviembre, los 10 embalses principales de La Paz y El Alto contaban con 25.430.343 metros cúbicos (m3) de agua; Tuni 11.111.626 m3; Incachaca 2.923.587 m3; Hampaturi 1.261.559 m3; Ajuankhota 349.012 m3; Milluni 1.088.626 m3; Hampaturi Alto 2.833.268 m3; Jankokhota 2.654.766 m3; Pamparalama 2.233.122 m3; Chacaltaya 740.298 m3; y Alpaquita 234.480 m3.