El alcalde de La Paz, Iván Arias, fue denunciado, por el mal manejo de las aguas que utiliza el matadero de Achachicala pues vertería sus desechos al río Choqueyapu y provoca olores nauseabundos en el vecindario por el faenado de ganado.

La denuncia fue hecha por el viceministro de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambios Climáticos y de Gestión y Desarrollo Forestal, Magin Herrera, quien demostró su preocupación porque estas aguas contaminadas atentan contra la salud de los paceños.
Las consecuencias para la Alcaldía por este mal manejo “puede ser desde una llamada de atención, o recaer en la pérdida de una licencia, o por el inicio de una acción penal”.
La autoridad nacional dijo que lo que debe hacer el municipio es tratar de recuperar de la categoría más baja de contaminación para elevarlo a una mas limpia para que no afecte a la población y al medio ambiente.


Una sola inspección
A pocos meses de iniciar su gestión municipal, el alcalde Iván Arias, realizó una inspección al matadero de Achachicala para verificar el funcionamiento de este predio que fue mejorado por su antecesor Luis Revilla con la compra de una planta de tratamiento de aguas residuales.
En esa oportunidad su compromiso fue hacer modificaciones a la fachada y las entradas, además de hacer más sostenible a esta empresa, pero no hubo nada. La Paz tiene tres mataderos autorizados: el de Achachicala, la Aurora de Sur y Campo Grande.
Mas observaciones
En octubre del pasado año, la Policía Forestal y de Protección al Medioambiente (POFOMA), el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (SENASAG), y el viceministro de Defensa al Consumidor realizaron una inspección al matadero municipal de Achachicala donde evidenciaron el hacinamiento del ganado, las malas condiciones de trato, además de maquinaria antigua y en mal estado.
Una de las observaciones más importantes fue el caldero que funciona desde los años 90 que ya cumplió con su tiempo de vida y que debió ser repuesto.
En esa oportunidad el viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, manifestaba su preocupación por las condiciones en la que se encontraba dicho matadero, toda vez que no se hizo nada para mejorar su infraestructura.