La Paz, 14 de Marzo de 2023 (Unicom – MMAyA).- El Estado Plurinacional de Bolivia concluyó este martes la consolidación de la propuesta de 12 puntos, trabajado de forma colectiva, que llevará a la Conferencia del Agua de las Naciones Unidas, que se realizara este 22, 23 y 24 de marzo en Nueva York, Estados Unidos. 

«Bolivia ha sido un ejemplo de lucha, además siendo un actor importante y no espectador. Nuestra obligación es continuar con la lucha, y la mejor lucha que se puede hacer es el de llegar a cada boliviana y boliviano siempre garantizando el agua en cada municipio, sea en el campo o en la ciudad» destacó el ministro Juan Santos Cruz.

“Este tiempo es un tiempo oscuro para la humanidad. Muchos líderes del mundo están pensando más en guerra y en armas que en la vida y salud. En este tiempo oscuro, nuestro pueblo, la sabiduría de nuestras abuelas y abuelos, nos debe fortalecer para llevar y sostener estos mensajes en la Conferencia Mundial del Agua”, expresó el Ministro de Relaciones Internacionales, Rogelio Mayta, a tiempo de dar lectura a los 12 puntos de la propuesta país. 

La propuesta que Bolivia llevará a esta reunión multilateral se resume en los siguientes puntos: 

  1. Reafirmar el derecho al agua potable y saneamiento como un derecho humano esencial, para el pleno disfrute de la vida y todos los derechos humanos, como fue establecido en la Resolución 064/292 de la Asamblea General de Naciones Unidas de 2010. 
  2. Reconocer en la próxima Asamblea de la Tierra, del año 2024, que el agua es el centro de la vida, estableciendo además los ríos, lagos, cuencas y a la Madre Tierra como sujetos de derechos, escuchando su vulnerabilidad y la amenaza actual que sufre su existencia en todo los lugares del mundo.  
  3. Crear un mecánico intergubernamental permanente del agua en las Naciones Unidas, que promueva el manejo, la gestión y conservación del agua, la erradicación de la pobreza y el desarrollo integral en el marco del cumplimiento de los objetivos internacionalmente acordados relativos al agua, fortalecimiento los compromisos políticos, sociales y ambientales. 
  4. Designar a un enviado especial para el agua de las Naciones Unidas, que tenga como misión activar ese mecanismo. 
  5. Reconocer la autoridad de la gestión comunitaria del agua y el saneamiento básico de las comunidades locales y pueblos indígenas. 
  6. Establecer la condonación de deudas de los países en desarrollo cuyos recursos financieros hayan sido destinados a la producción y acceso al agua, a la adaptación hídrica y a la resiliencia climática. 
  7. Exhortar a los Estados desarrollados y organismos internacionales y multilaterales a que proporcionen mayores recursos financieros, para gestionar, conservar y amortiguar los impactos de la crisis hídrica, por medio de la asistencia internacional. 
  8. Establecer la necesidad de que todos los países aprueben o actualicen las legislaciones nacionales, para garantizar la protección y conservación de las fuentes de agua, el acceso equitativo para todos los usos y seres vivos, promoviendo la participación de mujeres, jóvenes, pueblos indígenas y afrodescendientes  y grupos vulnerables. 
  9. Reconocer la importante interrelación que existe entre el agua, la soberanía alimentaria, la generación de energía y el mantenimiento de los sistemas de vida bajo  un esquema integrador y amónico para el desarrollo. 
  10. Visibilizar al agua como elemento de paz de integración de los pueblos, mediante el cual los Estados cooperan para garantizar la protección de las fuentes de agua y el uso razonable y equitativo. 
  11. Promover el derecho humano al mar, que no solo contemple el uso y acceso a los recursos marinos, sino que también signifique el derecho de todos los pueblos, con o sin costa, a decidir acciones que reestablezcan el equilibrio entre la tierra y el mar. 
  12. Cambiar la visión antropocéntrica y avanzar hacia un modelo más armónico  con la Madre Tierra, donde el agua es fundamental para todos los seres vivos y para todos los sistemas de vida. 

La propuesta  fue construida en base a los aportes de los centenares de representantes que participaron en los Diálogos regionales del Agua para la Vida en el Altiplano, Valles y Tierras Bajas, y convocaron a organizaciones sociales, organizaciones indígenas, instituciones académicas, cooperativas de servicio de agua y saneamiento, académicos, e investigadores de recursos hídricos, representantes de los órganos legislativos y ejecutivos de los gobiernos nacional, departamentales, municipales e indígenas, entre otros.